En el municipio de Toribío, Cauca, se registró la captura del patrullero de la Policía John Fredy Núñez Benítez por su presunta participación en el asalto a una casa de cambio de divisas.
Pero esa no fue la única aprehensión. Otros tres uniformados fueron privados de la libertad, todo porque la Fiscalía solicitó órdenes de captura contra los uniformados de la Policía Metropolitana de Barranquilla ya que estarían implicados en un millonario hurto de una casa de cambio de divisas, ubicada sobre la calle 76, en el norte de la capital del Atlántico.
El pasado viernes 16 de septiembre, en el norte de la capital del Atlántico, se ejecutó un hurto y en las pesquisas iniciales trascendió que criminales, portando uniformes originales de la institución armada y movilizándose en una patrulla policial, ingresaron al sitio en la mañana de ese día y despojaron al propietario del local de una suma de dinero que este tenía en la caja menor.
Al parecer, y de acuerdo con los investigadores, fue una cifra cercana a los 4.000 dólares.
A pesar de esto, con el paso de los días, el ente investigador, tras información obtenida sobre el hecho, verificó que se trataba de un grupo de uniformados que hacían parte de una estructura dedicada a actividades delictivas, todos adscritos a la Estación del barrio Ciudadela 20 de Julio.
Luego de eso, los funcionarios activos de la Policía, de acuerdo con la fuente de Fiscalía, se les abrió una investigación por hurto y peculado por uso de bienes materiales públicos, en este caso una patrulla de la institución para cometer el acto ilícito.
En ese sentido, un juez profirió órdenes de captura contra los patrulleros Mario Andrés Pérez Villanueva, Kevin Andrés Orozco Fong, John Fredy Núñez Benítez y el teniente Eduardo Villanis Bolaño por los delitos de concierto para delinquir, hurto y peculado por uso de bienes materiales públicos.
Este medio conoció que las capturas se dieron de manera simultánea en la ciudad de Barranquilla, así como en los municipios de Malambo y Toribio, Cauca.
Cabe señalar que en el caso de teniente Villanis, quien fungía como tercero al mando de la estación de policía de la Ciudadela 20 de Julio, ubicada en el sur de Barranquilla, se había divulgado su arresto a mediados de septiembre por la Justicia Penal Militar por desobediencia, que en la justicia ordinaria se configura como el delito de prevaricato por omisión, que es omitir funciones propias de su cargo.